martes, 30 de septiembre de 2008

BOTÍN

El mundo financiero occidental se derrumba a nuestro alrededor con un estrépito de platos rotos y las páginas de opinión de “Levante” se dedican hoy, íntegramente, a aburridos asuntos domésticos.
Solo dos páginas interiores con noticias de agencias dan cuenta de la decepción de Bush ante la negativa de los congresistas a aprobar su plan de salvación de los ricos, y la consiguiente caída en picado de las bolsas de valores. Yo también estoy decepcionado, esperaba un suplemento especial con toda clase de colaboraciones, pero el periódico local ha puesto hoy su vocación localista por delante de la noticia.

Intentemos llenar ese vacío. Sarcozy, aconsejado por Carla Bruni y llevado por su impulso napoleónico de poner a Francia en el centro del mundo, ha convocado a las autoridades monetarias europeas y a los jefes de los países europeos del G-8 (que no se lo que es) entre los que no está España, pese a disfrutar del sistema financiero mas seguro del mundo, dicen, para contribuir al diseño de un nuevo sistema financiero internacional, dado que, el que tenemos ahora, al parecer está hundido.

Botin, por su parte, con la lección bien aprendida del enunciado básico de la Planificación estratégica,
"Toda situación de amenaza contiene, a la vez, grandes oportunidades", ha comprado otro banco inglés, pero no crean que ha comprado todo el banco, así, en bruto. Se ha quedado con las sucursales y los depósitos (los clientes), pero para nada con las deudas. Es como el traspaso de un bar, me quedo con el local, con las existencias, con la clientela, pero las deudas las pagas tu.

Hay que suponer que las deudas las pagarán los estados europeos, los bancos centrales, o quien sea, vamos, los contribuyentes. Botin, no. El banquero cántabro se esta revelando como un financiero a la altura, por lo menos, de Rockefeller. No sería raro que, cuando la tempestad financiera escampe, Botin emerja como uno de los grandes financieros del mundo mundial, porque sabe cuando hay que vender, y cuando hay que comprar.

El sistema electoral norteamericano, su cámara de representantes, que se deben, ante todo, a sus electores locales, tiene mucho que ver con la revuelta de los congresistas y su negativa a apoyar a Bush. La ausencia de cobertura en el plan de Bush para los hipotecados, su apoyo en exclusiva a los prestamistas, está en la raiz del conflicto político que ha dado al traste con la propuesta de solución de la falta de liquidez en los bancos de inversión y las instituciones hipotecarias.

Como la situación financiera y la debacle de las bolsas no se puede mantener indefinidamente, hay que suponer que las diferencias políticas que han impedido hasta ahora un acuerdo operativo para parchear la situación, se resolverán mediante la negociación

Queda por saber lo duraderas que serán las consecuencias de todo este embrollo, como nos afectarán, a todos y cada uno de nosotros, que tipo de relaciones internacionales surgirán de la debilidad extrema de la credibilidad del sistema financiero estadounidense, que papel jugarán los nuevos países emergentes, aquellos que disponen de fondos soberanos que podrían estabilizar, o agudizar la crisis.

Ya se que son demasiadas preguntas, y no tengo respuestas, pero yo esperaba encontrarlas, por lo menos en parte, en algún suplemento financiero de la prensa de mi pueblo, pero, ya ven, hoy han puesto su vocación local, por delante de la noticia.

Al parecer, el que mas claro tiene todo esto es Botin. Ahora que los bancos ingleses están baratos, se compra uno, pero solo las sucursales y los depósitos, las deudas no. Esas, que las paguen otros.

Lohengrin. 30-09-08.

lunes, 29 de septiembre de 2008

LA CRISIS HA LLEGADO AL MARAVILLAS

He bajado al Maravillas y el bar estaba desierto como una tundra siberiana.

--¿Que pasa?, ¿Desalojo policial?, ¿Aviso de bomba?

--Es que estamos a final de mes.

--Pero, ¿No es a fin de mes cuando te pagan las deudas?

--Si. Pero hoy no ha aparecido nadie por aquí.

--Y eso, ¿porqué?

--La crisis.

Llevo meses leyendo en los periódicos eso de la crisis, pero hasta ahora la nebulosa abstracta de la información difusa y lejana de los acontecimientos financieros había prevalecido sobre la realidad cercana. Para comprender lo que está sucediendo en su justa medida se necesita de la proximidad.

Lees las cifras de paro del último mes y no reconoces nada personal en esa abstracción. Te encuentras a un vecino en la escalera en horas en que antes estaba trabajando, le preguntas, y te dice, --Me han echado del trabajo. Eso es microeconomía.

Recibes un papel del banco que no terminas de entender. Te vas a ver al calvo de la sucursal y le preguntas, -¿Que son esos signos negativos que pone en este papel?. Esto,¿no era renta fija? --Si, pero está a tipos viejos. Te miras en el espejo, te reconoces como uno de esos tipos viejos, y comprendes que cada vez te paguen menos por tus exiguos ahorros. Entonces le dices al calvo,

--Saca mis ahorros de esa mierda, y ponlos en algo a tipos nuevos. Microeconomía.

Vas a un Opencor a comprar un bizcocho para la partida de la tarde con los amigos, intentan cobrarte un precio superior al de la etiqueta, y solo cuando reclamas enérgicamente se avienen a cobrar el precio etiquetado. Microeconomía.

Encuentras a un viejo conocido que compró una vivienda unifamiliar en la Playa de la Patacona, y te cuenta que el mayor constructor de Heliópolis se la vendió sobre un plano con el compromiso de que estaría en primera línea. Ahora, te dice, su casa está rodeada de torres de apartamentos y edificaciones de servicios de varias alturas, y el constructor ha sido condenado a pagar 3 millones de euros por un fallo judicial que renoce que hubo engaño. Microeconomía.

Mis neuronas no están preparadas para reconocer la abstracción como algo próximo, cercano.
Casi todas las cifras exorbitantes que aparecen en los titulares de los periódicos de modo cotidiano exceden de mi comprensión. No estoy preparado para la macroeconomía, esa agregación de innumerables sucesos que, cuando se cuantifican en su conjunto, nos llevan a unas magnitudes de vértigo.

En cambio, puedo entender a Tony perfectamente cuando me habla sobre la recaudación del bar.
Entiendo, después de la explicación del calvo de la sucursal bancaria, que mis ahorros hayan menguado, me siento cercano de las tribulaciones del vecino que ha perdido su empleo, me concierne directamente cuando en un supermercado intentan engañarme con el precio de un artículo, y percibo de un modo directo la conducta engañadora de un constructor, cuando se hace evidente a través de un antiguo conocido. Microeconomía. Si es tan fácil de entender, ¿Porqué nos trasladan la realidad en términos macroeconómicos?

Por cierto, el título de la entrada de hoy es cortesía de Tony, el jefe del Maravillas.

Lohengrin. 29-09-08.

sábado, 27 de septiembre de 2008

REBELIÓN EN LA GRANJA

Los telediarios de la noche han mostrado las imágenes de multitud de manifestantes en Estados Unidos, que protestaban por la propuesta de inyectar 700.000 millones de dólares en las entidades financieras en dificultades en aquel país, cuyos ejecutivos cobraron sumas millonarias por su gestión antes de que se descubriera el pastel. Algunos de esos manifestantes alegaban que se trata del mayor robo de la historia. Hay algo que me desconcierta en este asunto, si realmente es un robo como dicen, ¿donde está el botín?.

Veamos. Al parecer, es un hecho comprobado que varias entidades financieras concedieron masivamente créditos hipotecarios para la adquisición de viviendas, a personas sin capacidad para reembolsar esos créditos. Hay que suponer que esos ingentes recursos se aplicaron a la compra de inmuebles, que esas hipotecas no han sido todavía satisfechas en su totalidad, y que buena parte de esos deudores no podrán pagarlas nunca.

Que tenemos?.De momento, un gigantesco problema de falta de liquidez. Un parque de viviendas que nadie sabe quien pagará, unas entidades financieras hipotecarias quebradas. Hasta aquí, parece un problema local estadounidense, y el botín estaría, en parte, en manos de los ejecutivos que cobraron sus incentivos generados con prácticas heterodoxas, y en parte inmovilizado en las casas donde se aplicaron esos capitales.

Está claro que los fulleros financieros se han pasado, pero si no analizas paso a paso lo que se va sabiendo del asunto, te pierdes. Los fulleros financieros norteamericanos, al encontrarse con la patata caliente de las hipotecas basura, también llamadas sub prime, endosaron la patata al sistema financiero internacional, mediante títulos negociables que, al principio, permanecieron bastante opacos.

Que ha ocurrido despues? Ha ocurrido que la banca inglesa, la alemana, la suiza, y alguna mas, han tenido que cubrir con miles de millones de euros, cuando el fin de la opacidad ha dejado al descubierto el timo de la estampita de que habían sido objeto, los títulos fallidos de alto riesgo que les habían colado. Esto si que lo veo mas claro. Esto ha sido, efectivamente, un robo, y el botín sabemos adonde fue a parar, a las entidades emisoras norteamericanas de esos títulos.

Me parece una paradoja que los ciudadanos europeos cuyos impuestos se han usado para salvar los bancos afectados por el robo yanqui, no se manifiesten en la calle contra ese dislate, y sean los norteamericanos quienes estén en la vanguardia de ese movimiento incipiente. Al fin y al cabo, si descontamos los incentivos de los ejecutivos listos, ellos han recibido algo material, sus casas, como contrapartida de todo el asunto –otra cosa es lo que vaya a suceder en el futuro, si no pueden hacer frente a sus compromisos-- mientras que los europeos que han pagado, vía presupuestos, por ese papel mojado, no reciben nada a cambio.

Está claro que los manifestantes que claman contra la salvación de las entidades financieras quebradas con 700.000 millones de dólares de dinero público, lo hacen porque tienen claro que una medida así, llevará aparejado el empobrecimiento de millones de norteamericanos, porque una cifra tan astronómica no parece compatible con el mantenimiento de programas sociales.

El asunto está jodido, pero todos los analistas serios coinciden en que asistimos al principio del fin del predominio norteamericano como campeón del mundo financiero internacional.

No sabemos que se ha hecho de la mayor parte del botín, pero quienes quiera que sean los responsables del golpe, le han hecho un flaco favor a su país. Ni los comunistas de Ho-Chi-min, ni Castro, ni la URSS en la época soviética, ningún enemigo ideológico de Estados Unidos en toda la historia, lanzó nunca un golpe tan demoledor a la primera potencia económica mundial.

Por lo visto hasta ahora, aún no conocemos las soluciones, pero una cosa está clara, el enemigo estaba dentro. Habrá que seguir el asunto de cerca, a ver que pasa.

Lohengrin. 27-09-08.

WOODY.BARCELONA.

Ves una película antigua de Woody, compruebas lo feo que era el tío y entiendes que se hiciera director de cine para ligar mas. Toda una carrera cinematográfica dedicada a hacer cine con mujeres, no habrá sido solo para entenderlas, digo yo. Las ha tenido de todos los colores, altas, bajas, esmirriadas, neumáticas, rubias, morenas,pelirrojas y casi siempre inteligentes.

Si un director español hubiera firmado la última película de Woody, que vi ayer, esa en la que mezcla Barcelona con tópicos guitarreros, y saca a un catalán –ahora que el precio del queroseno hace quebrar las aerolíneas-- que se va de fin de semana a Oviedo con dos chorbas en una avioneta prestada, con lo que gastan esos cacharros, hubiéramos crucificado al firmante y echado sus despojos a los perros, pero a Woody se lo consentimos todo porque, en el fondo, nos habría gustado ser como el.

Si Woody hubiera sido mujer y hubiera hecho películas sobre los hombres, no habría alcanzado la notoriedad que le acompaña a todas partes, pero su viaje de entomólogo al corazón femenino alcanza su expresión habitual en el personaje de Vicky, (Rebeca Hall) una mujer de clase media neoyorkina, que sin duda es el fuerte de Woody y parece acumular todas las experiencias de observación del director en su larga vida en su entorno natural, lo que le permite un dibujo preciso y a la vez sutil de su carácter.

Esa maestría en el análisis de género, junto al ritmo de la película, hacen que transcurra la hora y media de su proyección sin que el espectador tenga la mas mínima sensación de aburrimiento. En eso, en el ritmo, fallamos a veces nosotros. El jueves vi dos películas españolas y todavía se nota que esa asignatura –que el espectador no se aburra en su butaca-- no la hemos asimilado del todo.

La secuencia mas brillante de la película me pareció esa en la que Bardem, Penélope Cruz y Scarlett –no la que dijo aquello de “A Dios pongo por testigo de que nunca volveré a pasar costo” como dijeron anoche en El Intermedio, sino la Johansson, esa tia buenorra con unos morros de aquí te espero, que, además, según las Notas de producción, es muy inteligente-- se enredan en un diálogo a tres, mezclando el inglés y el español, lo que le da un dinamismo a las imágenes que es toda una lección de cine.

Vi “Vicky Cristina Barcelona” en los Albatros, cerca del barrio de Xúquer, en Heliópolis. Las salas están junto a una mezquita árabe, de esas construidas con dinero Saudí. La sala estaba llena, pero la mezquita parecía vacía, aunque cualquiera sabe, pues al estar rodeada de celosías, esa expresión de la concepción del hábitat musulmán como un reducto de privacidad, no me fue posible saber lo que pasaba dentro.

Al contrario que en el cine de Woody, donde se sacan al exterior todas las tribulaciones del alma humana, para que se ventilen. Es enternecedor ver el triángulo formado por Bardem, Penépole y Scarlett, cuando sus lados se descomponen por la fragilidad del pegamento que los une temporalmente, y optan por la resignación, en lugar de por la tragedia.

Penélope se pone sin dificultad en la piel de una mujer que es una fuerza de la naturaleza, inestable y poderosa como ella, que se concilia muy bien con esa presencia suya en la pantalla, pasional y arrabalera, tan típica de las grandes actrices italianas, como la Loren o la Magnani, a las que a mi, es una opinión, me recuerda tanto.

En cuanto a los cuadros del pintor catalán, Bardem, contienen todos los colores, como las novias que se le suponen al director de esta película, tópica –todo el mundo lo ha dicho—pero divertida, brillante en algunos momentos, y con un dibujo preciso y sutil de algunos personajes, sobre todo el de Vicky.

Y no voy a contar mas, para no fastidiar a quienes aún no la han visto. Eso si, conviene verla en versión original, con la ventaja de que los diálogos alternan el inglés y el español, en una mezcla muy acertada, que hace mas interesante su visionado.

De todas las novias de Woody, la que mas me ha enamorado ha sido Diane Keaton. Siempre me pareció la mas inteligente de sus novias, hasta cuando aparece desnuda en “Cuando menos te lo esperas”, que rodó con Nicholson, sabe hacer un desnudo inteligente.

En fin. Woody. Barcelona.

Lohengrin. 27-09-08.

viernes, 26 de septiembre de 2008

PAOLO

He recibido un correo electrónico de Paolo Barzman, director, entre otras películas que conforman su filmografía desde 1.992, de “Aritmética Emocional”, a la que hice referencia en mi página del blog “LA NOCHE”. Mi asesor informático en materia de incidencias de mantenimiento del Blog, cuando le digo que tengo por norma no contestar ninguno de los correos que recibo, me mira como si yo fuera un tipo raro.

Si alguien te mira como si fueras un tipo raro, ve haciéndote a la idea de que, en alguna medida, lo eres. Lo cierto es que yo no me siento raro, sino muy cómodo en el nicho elegido cerca de los límites, del margen del sistema, en un lugar casi deshabitado por la publicidad y las relaciones mas o menos públicas, o sea, un rincón íntimo, tranquilo, prácticamente desconocido, excepto para la minoría de usuarios del blog, cuya atención agradezco, porque la preferencia por la privacidad no excluye la cortesía.

Paolo me dice en su correo que le ha resultado interesante leer la mezcla de sueño y realidad de la página “La Noche” y luego nos exhorta a todos a que hablemos de su película, porque el oficio de director de cine, uno de los mas complicados y precarios que se puede elegir, a diferencia del de bloguero, necesita imperiosamente de la publicidad para que su cine se vea.

Debe ser por eso que, cuando he accedido a las páginas de cine de Google para documentarme sobre la filmografía de Paolo antes de escribir esta entrada, un aluvión de páginas publicitarias de entidades financieras me ha hecho huir precipitadamente.

Antes de esa escapada, he tenido tiempo de enterarme de que Paolo hace tiempo que está en el oficio, primero como realizador y guionista de televisión, luego como director de largos desde hace mas de quince años. Yo, la verdad, cuando recibí su correo, pensé que se trataba de un director independiente primerizo, no sabía que fuera un profesional sólido y experimentado, porque no acababa de creerme que alguien con ese currículo tuviera tiempo para detenerse en mi página.

Al parecer, he subestimado el alcance de la comunicación cibernauta, mucho mas abierta al mundo de lo que mi cerrada concepción de nicho privado me hacía percibir.

En fin, quiero agradecer a Paolo su paso fugaz por el blog y en justa correspondencia, desde aquí propongo que se hable de su película, “Aritmética Emocional”, que se vote donde quiera que haya que hacerlo y que, entre todos, apoyemos su éxito en el oficio que ha elegido, uno de los mas difíciles y precarios de los que uno puede elegir. Director de cine.

Pido disculpas a Paolo por hacer público aquí su correo y por no contestarle por la misma vía, pero es norma de esta casa no contestar ningún correo electrónico recibido, salvo en las páginas del blog, y solo en contadas ocasiones.

Recuerdo a los usuarios del blog que, al pie de cada página, hay una opción de comentarios para que todos expresen su parecer libremente sobre sus contenidos. Mi compromiso de publicarlos íntegramente, cualquiera que sea su sentido, es firme.

Llueve. He de ir terminando, porque dentro de diez minutos he de salir. Esta mañana he bajado al Maravillas. Llovía. Cuando he ido a por el pan, llovía. La lluvia no tiene nada de melancólica, somos nosotros, los blogueros, los directores de cine, los guionistas, los fabuladores, quienes le damos a veces ese carácter.

En fin. Llueve. Saludos, Paolo.

Lohengrin. 26-09-08.

jueves, 25 de septiembre de 2008

GENTE CORRIENTE

Hernández, profesor de Sociología y Antropología Social, se ocupa hoy, en la página 3 de “Levante”, de la incompatibilidad social de los valencianos, que los hace encuadrarse en banderías algo irreconciliables y que el profesor atribuye a su distinto bagaje emocional. Tal vez, por eso, en el Parlamento de Heliópolis, cuando unos hablan, otros no escuchan.

El grupo popular en las cortes se ha negado a frenar el gasto corriente, que se llama así para distinguirlo de las inversiones, pero también podría interpretarse como el uso de los recursos públicos para atender las necesidades colectivas de la gente corriente. Una parte de esos recursos se destina, directamente, a las necesidades públicas de los ciudadanos, mientras que otra cubre las retribuciones de quienes han sido elegidos para administrarlos.

Es una lástima que, quienes han dado esa información del debate parlamentario, no hayan precisado que parte del pastel va a los administrados, y cual se destina a los administradores. Como la oposición ha propuesto la congelación de los salarios de los administradores, o la reducción de los cargos públicos, solo con esa información objetiva podríamos entender si esa propuesta de la oposición es el chocolate del loro, como afirman los populares, o se trata del Moet Chandon de los administradores, como parece sugerir la oposición.

Con esta mezcla de churras y merinas, esta inclusión de los privilegios de sus señorías en el mismo saco de las necesidades colectivas de la gente corriente, la verdad, uno no sabe a que atenerse, por lo que se ve obligado a reservar su opinión.

Contrasta esta opacidad informativa con las noticias tan claras y explícitas que vienen del otro lado del océano financiero. Al parecer, la tan traída y llevada crisis financiera internacional, comienza a dejar de serlo, para derivar hacia el thriller policíaco, con la intervención, nada menos que del FBI, en las corporaciones financieras estadounidenses intervenidas por el gobierno de Bush.

El término crisis comienza a ser sustituído por el de fraude.Un fraude gigantesco, en todo caso, con un alcance universal, como no podía ser menos a causa del marco globalizado de la actividad financiera y la ausencia de fronteras y controles.

En menor escala, Heliópolis no está al margen de otras actividades presuntamente fraudulentas, con el mismo perfil de cine negro, al autorizar el fiscal anti corrupción la intervención de la policía judicial que se ha personado en distintas entidades bancarias de Castellón, con el fin de obtener información directa de las cuentas bancarias del señor de la alianza del norte que gobierna esa provincia afgana, cuyas señas de identidad son de todos conocidas.

Después del debate parlamentario en las cortes de Heliópolis, esas en las que mientras unos hablan, otros no escuchan, dicen que Camps ha salido reforzado y ha ido en seguida a la fábrica de acuñación en bronce de los perfiles de barones del partido, para supervisar personalmente la ultima emisión de su perfil.

Hará bien en conservar su colección de medallas pues, a la vista de su estrecha asociación con el señor de la alianza del norte, y las tribulaciones jurídicas por las que se adivina que tendrá que pasar éste, ni todas las medallas del mundo serán suficientes para salvar el perfil político de Camps de las salpicaduras que le pueden caer encima si los policías, los fiscales y los jueces hacen por fin su trabajo, con total independencia de presiones e interferencias ajenas, y su socio político queda, como el Rey aquel, desnudo frente a sus electores.

Aunque es posible que todo esto no interese a la gente corriente, a la que le queda la buena noticia, que yo comparto, de que podrán suavizar el efecto del encarecimiento en sus hipotecas, mediante una deducción fiscal autonómica en su próxima declaración de impuestos. No es lo mismo que escaquear, presuntamente, seis millones de Euros de sus declaraciones fiscales, pero algo es algo.

En fin. Gente corriente.

Lohengrin. 25-09-08.

martes, 23 de septiembre de 2008

PETRÓLEO

Ahora que estamos a punto de entrar, de verdad, en el siglo XXI, una vez que se resuelvan los graves problemas en que nos han metido los fulleros de las finanzas, una empresa de investigación petrolífera pide al gobierno de España ampliar el área de su búsqueda de combustibles fósiles frente a las costas de Heliópolis.

Los fósiles, como su nombre indica, son cosa de paleontólogos, y no deberíamos permitir que la industria los use para ensuciar el planeta. Sobre todo, porque ha transcurrido demasiado tiempo desde que las caravanas de camellos cruzaban el desierto cargadas con petróleo para la iluminación de la ciudad de Bagdad –Marco Polo dejó testimonio escrito de haberlos visto-- y dos mil años son suficientes para que la tecnología energética haya progresado. Si no lo ha hecho, es porque nos hemos acomodado a fuentes energéticas antiguas, y ya es hora de exigir las nuevas.

A ver si los científicos se aclaran, arreglan el acelerador de partículas de una vez y, si el choque de materia desconocida no nos arroja por el sumidero de un agujero negro, nos enchufamos allí y mandamos al carajo el jodido petróleo, que no nos da mas que disgustos.

El mundo de energías limpias que sospecharon quienes escribieron sus anticipaciones futuristas cuando la revolución industrial excitó las intuiciones que anunciaban un progreso tecnológico indefinido, parece una de las pocas cosas en que no han acertado. Uno se pregunta porqué, y una posible respuesta es que los intereses monopolísticos de quienes han conformado el mundo energético de acuerdo a sus preferencias inmediatas, tal vez ha frenado las investigaciones que iban en la dirección de superar esos viejos recursos.

Ahora, según cuenta “Levante”, en su página 15, Capricorn Spain, una filial de Cairn Energy, se apresta a ampliar su búsqueda de una piedra filosofal, al parecer del tamaño y la calidad de la de los yacimientos del Mar del Norte, frente a la Albufera y las Islas Columbretes. La Albufera, por su cercanía, la conozco como la palma de mi mano y se de un biólogo que vivía en una masía de Castellón, y se pasaba meses investigando en la reserva marina de las Columbretes. Los petroleros afirman que su intervención no pone en riesgo ninguno de esos ecosistemas, pero también nos decían los fulleros de las finanzas que todo iba bien, y ya ven.

En este asunto, coincido con la posición del Gobierno de Heliópolis, que se opone a la autorización del permiso de investigación, aunque al parecer no tiene competencias para denegarla. No solo por la vecindad de esos ecosistemas al área investigada, sino porque el petróleo me parece, a estas alturas, una solución arcaica al problema de las necesidades energéticas de las sociedades avanzadas.

Tengo la convicción de que, si todos los recursos empleados desde hace mas de cien años en la investigación petrolífera, se hubieran dedicado a la búsqueda de fuentes energéticas alternativas, ese combustible maloliente sería, ahora, un auténtico fósil, solo de interés para los paleontólogos,y nosotros viviríamos en un planeta mas saludable. Lo que no comprendo es porqué, los monopolistas del petróleo, se han negado a ello. Ahora serían, sin duda, los monopolistas de las energías limpias de ese planeta saludable.

Nos acomodamos. Todos. Es mas fácil dar continuidad a un negocio trillado, que buscar otro nuevo.
Es mas fácil convertirse en un fullero de las finanzas, hacer, uno tras otro, todos los chanchullos que hagan falta para vivir del cuento, que establecer fórmulas responsables para que los sistemas funcionen con un nivel mínimo de responsabilidad social, para darles continuidad y solidez.

En fin. Ahora que puede estar cerca, cuando arreglemos los líos de los fulleros financieros, el verdadero comienzo del siglo XXI, nos ponemos a descubrir petróleo, un combustible fósil que ya se usaba hace mas de dos mil años. Lo nuestro, no tiene remedio.

Lohengrin. 23-09-08.

lunes, 22 de septiembre de 2008

LA REALIDAD

Vuelves del ámbito subjetivo de la realidad, donde la felicidad, aunque efímera, es posible, y los titulares de los periódicos que, aunque no son toda la realidad, son porciones extraídas de lo real, manipuladas como si fueran productos alimenticios a los que se añaden toda clase de conservantes, colorantes y, pocas veces, edulcorantes, te dan en la cara con la violencia del lunes, día de la semana en el que quienes escriben las noticias, suelen estar de mal humor, porque también ellos han abandonado la felicidad periférica del fin de semana para volver a alguna forma de realidad.

Apenas dos horas después de abandonar la comarca en la que está ubicada mi casa insostenible, en la que acostumbro a permanecer durante periodos variables, mitad idílicos, mitad enervantes, una tormenta anunciada ha caído con una violencia extrema sobre los cultivos y los cultivadores, dejando arrasada buena parte de la cosecha.

En Heliópolis, la radio informa de que ETA, haciendo gala de la tozudez que caracteriza a cualquier fanatismo, ha vuelto a matar. Cruz Sierra, en las páginas de “Levante” hace una minuciosa disección del estado de salud financiera de los empresarios grandes y menos grandes, y los trabajadores de la sanidad pública expresan su inquietud por los efectos en sus empleos de la política de austeridad que la derecha se saca de la chistera cada vez que la palabra crisis se pone de moda.

Yo, la verdad, me siento confuso al oponer dos conceptos tan distantes como felicidad y realidad.
Parece que la felicidad es algo bastante difuso pero, en todo caso, enteramente ligado al ámbito de lo subjetivo, puesto que, si no hay sujeto, no hay percepción de aquello que fuere ese término tan impreciso.

Por otro lado, la realidad no es tampoco enteramente objetiva, pues los datos objetivos que produce se nos transmiten después del añadido de colorantes y conservantes que alteran su esencia original. No hay mas que escuchar los discursos de los responsables del gobierno y de la oposición que versan sobre la misma cosa, para darse cuenta de que no son matices lo que los diferencia, sino que sus mensajes vienen de planetas distintos y distantes.

Algunos, en nombre de la realidad, lanzan mensajes auténticamente surrealistas, como ese joven aspirante a cargos de mas enjundia en el partido de la derecha española, que acaba de declarar públicamente que en este país todos –los jóvenes, ha dicho-- somos del partido popular, solo que no lo sabemos.

Este muchacho tan ambicioso y desprejuiciado a la hora de decir sandeces, ha resuelto mis dudas entre realidad y felicidad. Aunque el, claro, como sus potenciales votantes de izquierda respecto a sus preferencias electorales, no lo sabe.

Parafraseando al desnortado político joven de la derecha española, ya podemos afirmar que en este país, todos sus habitantes son felices, solo que no lo saben. Ese argumento confirma lo que yo sospechaba, que la felicidad es un asunto, esencialmente, subjetivo. Y que basta el reconocimiento, la percepción de encontrarnos en ese estado de ánimo para que, con independencia de cuales sean las condiciones objetivas de lo real que nos rodean, nos sintamos así, felices.

Pero, siendo la felicidad, por su propia naturaleza en relación con lo real, algo efímero, apenas un momento fugaz entre los conflictos de la vida, este representante “moderno” de la derecha mas anticuada de Europa habrá sentido el placer subjetivo del efecto de su arenga entre sus correligionarios, cuyos aplausos le habrán producido una sensación cercana a la felicidad personal, pero al imponerse la realidad de la acogida de sus insensatas palabras en el conjunto de la opinión pública del país, ese efecto de euforia habrá cesado de inmediato, porque la felicidad, por definición, no dura, no resiste el contacto con la realidad cotidiana.

La realidad es que las gentes, jóvenes y viejos, saben bien lo que quieren, y lo que no quieren, que el pensamiento de izquierdas tiene, a pesar del devenir de los tiempos, una sólida base histórica, que no se puede confundir con un artículo de moda efímera, como demuestran las últimas consultas electorales y que en este país, a la derecha se la conoce bien, por sus supuestos valores, y por su ejecutoria política cuando gobierna, así que el político imberbe que ha dado motivo con sus argumentos irracionales a este comentario, ya ha tenido su momento de gloria, de felicidad personal, pero a partir de ahí tiene que vérselas con la realidad que demuestra, de manera cotidiana, que la mayor parte de la gente si sabe donde quiere estar, lo mas lejos posible de la derecha antigua de siempre.

Lohengrin. 22-09-08.

domingo, 21 de septiembre de 2008

LA FELICIDAD

La felicidad, en el supuesto de que exista, debe ser una sensación fugaz, transitoria, que requiere una disposición previa del ánimo para percibirla y, en mi opinión, para que sea completa, dentro de su fugacidad, debe ser compartida.

Anoche tuve esa rara sensación, que compartí con mi mujer. Tenemos una casa de esas que ahora se llaman sostenibles, cerca de una aldea algo remota, alejada de los núcleos de población, y no doy mas señas. Es sostenible económica y medioambientalmente, porque ninguna compañía, monopolio o corporación energética sabe de su existencia y por consiguiente, no facturan nada. Dispone de instalación de agua y luz, pero el agua la suministra un aljibe y al alumbrado un acumulador. Cuando falla el acumulador, recurrimos a las velas. El único inconveniente es que es una casa tan vieja que su mantenimiento la convierte, a veces, en insostenible.

Pero yo quería hablar de la felicidad, no de los inmuebles diseminados en parajes rurales. Esa sensación huídiza la compartimos anoche mi mujer y yo sentados bajo el porche de la casa, frente al paisaje de colinas arboladas que rodea el lugar donde está ubicada la casa, orientada hacia poniente, mientras Radio Clásica emitía una ópera que, al principio, pensé que era de Mozart, y resultó ser de Hendel. Casi tres horas de retransmisión operística en directo, una historia basada en Orlando Furioso, llena de conspiraciones y dramatismo, pero con una música que, en ocasiones, te llevaba a percibir, alíada con el entorno, la vela encendida sobre la mesa, y un cielo aún sin luna, en el que aparecía Venus desde el Sur, esa placentera suspensión del ánimo que a veces acompaña las experiencias contemplativas.

A medida que la historia operística avanzaba, el cielo se cubría de masas de gases estelares salpicadas por un gran número de estrellas, solo visibles en lugares como este, de cierta altitud, alejados de la contaminación luminosa de los núcleos urbanos. Además de la música, el paisaje, la oportunidad contemplativa de la soledad compartida, la temperatura en ese lugar serrano y en esa noche, era de unos veintidós grados y no había viento. La constelación de elementos era tan favorable, que habría sido un delito no percibir ese momento fugaz como una expresión de lo que los humanos buscamos a veces sin encontrarlo.

Al día siguiente, he tenido la confirmación mas prosaica de que lo que define la felicidad es su carácter fugaz. Mi mujer tiene un desmedido amor por la logística de los trastos y por las tareas de mantenimiento. En lugar de satisfacerlo, haciéndose Jefa de Logística y Mantenimiento de alguna instalación portuaría, vuelca esa vocación en la casa insostenible que compartimos en el medio rural, y hoy me he desayunado con una larga lista de chapuzas, en las que me he visto obligado a colaborar de manera activa.

Reproduzco la lista, para que no crean que exagero. Aligerar de trastos el desván. Hacer un agujero en una pared de ladrillo, poner una rejilla y pintar los bajos del comedor. Hacer otro agujero en la pared del dormitorio –como es de piedra, ha habido que pedir una herramienta y una extensión eléctrica desde casa de un vecino-- poner otra rejilla. Llevar las esterillas del coche al lavadero, lavarlas y tenderlas. Poner dos tacos en la pared de piedra, del dormitorio de invitados, para sujetar el cabezal. Aserrar dos cuñas de madera y pegarlas, para asegurar la cama. Llevar al taller la bomba de agua del aljibe, para repararla (lo único imprescindible).

Cuando me he podido escaquear, con la excusa de preparar el estofado de garbanzos, mientras el ramito de romero, los ajos, la cebolla picada, las rodajas de chorizo y los taquitos de jamón, rehogados en el aceite de oliva, emitían un aroma que me reconciliaba con el mundo, evocando la perfección del momento de la noche anterior, he concluido, con toda claridad, que la felicidad, si existe, es una sensación fugaz, transitoria, que requiere una disposición previa del ánimo, que debe ser compartida para ser completa y, desde mi punto de vista, no tiene nada que ver con el bricolage, la logística ni el mantenimiento.

Lohengrin. 21-09-08.

viernes, 19 de septiembre de 2008

LOS CHICOS CON LOS CHICOS, LAS CHICAS CON LAS CHICAS.

Una jueza de Denia sale desde hace algún tiempo en los papeles, porque dicen que se negaba a bendecir bodas homosexuales en su jurisdicción. Hoy a vuelto a salir, porque un alto tribunal ha anulado una sanción simbólica que le había sido impuesta en otra instancia. Yo, la verdad, no había seguido el asunto y pensaba que era uno de esos casos de objeción ideológica a las leyes emanadas del gobierno socialista, pero he leído la letra pequeña y la jueza no objeta nada, sino que esgrime un argumento jurídico como soporte de su negativa.

Al parecer, los aspirantes a contrayentes eran extranjeros y, según la jueza, en sus países de orígen no hay amparo legal para el acto jurídico que pretendían consumar. No entiendo una palabra de derecho internacional, ni siquiera del doméstico, pero, así, a bote pronto, el argumento de la jueza me parece, por lo menos, defendible.

Dejando de lado el aspecto jurídico de la cuestión, hay algunas consideraciones que se pueden extraer de la noticia. La primera es que, siendo Denia, Diánum en la época romana, según dicen por la cercanía de un templo dedicado a Diana, sucesora de la Artemisa griega, un lugar evocador de las culturas clásicas del placer y el carpe diem, habitado por un gran número de extranjeros que vienen a disfrutar de su apacible clima mediterráneo y sus hermosos paisajes marineros, es una pena que Laura, la jueza, no se haya dejado cautivar por esa tolerancia de civilización antigua y haya elegido imponer el rigor de los textos legales, aunque, claro está, para eso le pagan.

La segunda cuestión, es que no entiendo la manía que tiene la gente de casarse, con independencia de sus opciones personales sobre la sexualidad, teniendo en cuenta el elevado grado de fracasos que acompaña la figura jurídica del matrimonio. Puedo entender que las bodas homosexuales sean otra forma de obtener visibilidad y nuevos derechos, por un colectivo cuyos componentes fueron calificados en otro tiempo de delincuentes por el derecho del Estado –entonces no había Estado de derecho-- que imponía las siniestras leyes de vagos y maleantes y peligrosidad social.

Hace tiempo que esas leyes fueron derogadas, y es evidente que, ese colectivo, y otros, reciben un trato menos discriminatorio en nuestro ordenamiento legal, pero tengo dudas, por mi ignorancia de la técnica del derecho internacional, de si nuestras leyes amparan o no a ciudadanos extranjeros en materia de matrimonios homosexuales.

En este asunto, como en otros, tengo la sensación de que ha primado el ruido de la desinformación, sobre la racionalidad jurídica de los hechos, pero no me siento cualificado para dar una opinión sobre si el trato que ha recibido la jueza, de los medios de comunicación y de sus superiores, --ha sido trasladada-- ha sido proporcional a la verdadera naturaleza de su actuación profesional.

En todo caso, si en la actuación de Laura hubiera alguna motivación inconsciente de hostilidad
o rechazo hacia las opciones sexuales diferentes, debería reflexionar sobre ello, porque igual es un signo de una preferencia oculta que no se aviene a reconocer.

Después de todo, como dice mi mujer, la afinidad entre personas del mismo sexo es lo mas natural, mientras que lo anómalo es la búsqueda frustrante e infructuosa entre personas de sexos opuestos, de esa misma afinidad, lo que explicaría el alto grado de fracasos del vínculo matrimonial entre parejas heterosexuales. Si a ellas no les negamos el acceso al matrimonio, aún a sabiendas de que van a fracasar en un elevado porcentaje, para que negarlo a los gays, aunque sean extranjeros.

No se porqué me he metido en este berenjenal, a opinar de cosas de las que no entiendo una palabra. Pido disculpas a todos por mi atrevimiento. Lo que sucede es que, escribir todos los días sobre la crisis financiera me conduce hasta la fatiga. Y a ustedes también, supongo.

Lohengrin. 19-09-08.

jueves, 18 de septiembre de 2008

ENTRE PARÉNTESIS

El Presidente de la patronal española ha pedido al gobierno que abra un paréntesis en la economía de mercado. Para poder colarse dentro él y los suyos, supongo, disfrutar de las ayudas estatales para remediar su mala gestión económica y financiera, y salir, cuando se pueda, de nuevo al mercado como si no hubiera pasado nada. El argumento para justificar la intervención del Estado en el libérrimo mercado, es el de siempre, si no recibimos ayudas, el número de desempleados podría aumentar en un millón. Cada vez que uno de estos señores abre la boca, su aliento tiene un tufo fétido a chantaje y amenaza. Pero veamos la cosa desde otro punto de vista.

No acostumbro a usar con frecuencia el paréntesis, prefiero las comillas o los guiones, pero he de reconocer que esos segmentos ligeramente curvos que separan un texto, de su contexto, tienen algo de seductores. Ahora que la burbuja ya no nos proteje, es tentador soñar con un mundo aíslado, protegido de los amenazantes adjetivos que invaden los titulares de la prensa internacional, pero, incluso para la gente de a pie, que no tiene inversiones que peligren, ni demasiados vínculos con la crisis financiera internacional, es enormemente tentador vivir una temporada entre paréntesis.

Abrir un paréntesis, y colarse en el, significa, entre otras cosas, dejar fuera de esos segmentos con curvas sensuales la carga de los aspectos indeseables de nuestra propia naturaleza. Implica, además,
una fantasía de renovación, un nuevo comienzo, en el que habríamos dejado fuera todo el lastre de nuestras fragilidades, debilidades y errores, pues la condición esencial del paréntesis es que rompe los enlaces necesarios con nuestro discurso vital anterior, cuyo sentido interrumpe temporalmente, sin alterar ese marco de referencia, al que podremos regresar.

Fuera, a extramuros de ese paréntesis, quedarían, si interpreto bien la petición de la patronal, las conductas excesivas que les han conducido a solicitar ese amparo. La codicia, la avaricia, la ausencia de ética y de responsabilidad social quedarían suspendidas, también, por una temporada, a cambio de poder chupar de la teta de papá Estado. Después, una vez restablecidos los equilibrios, todo volvería a la normalidad.

Yo también quiero un paréntesis de esos. Podría reorganizar los aspectos mas caóticos de mi propia vida. Olvidaría temporalmente mis obsesiones, mis debilidades de carácter, mis conductas impropias y viviría feliz en ese espacio nuevo, alejado de mis contradicciones, y ahora que lo pienso, pediría quedarme en el, sin volver al libre mercado de las emociones.

Sin embargo, el portavoz de nuestros empresarios, adolece de una falta de realismo todavía mayor que la mía. Piensa que, después del paréntesis, las cosas van a volver a ser como antes, y en eso se equivoca, seguramente porque ha leído poca historia económica. En mi página Mutación argumenté que lo que está sucediendo ahora mismo es, mas que una crisis, una mutación, y ahora veo que esa interpretación se ve confirmada por personajes tan influyentes como Attali.

De una mutación tan profunda como la que, en mi opinión, estamos viviendo, uno no se salva poniéndose entre paréntesis, porque el escenario que encontrará al final en nada se va a parecer al de partida. Lo que exige una situación así no es el encogimiento entre dos segmentos, sino la anticipación, el realismo de reconocer que las reglas han cambiado, y hay que adaptarse a una situación que todavía no se conoce, pero de la que hay que esforzarse en vislumbrar las tendencias.

La propuesta del portavoz de la patronal, vista a la luz de estas reflexiones, parece mas bien una reacción de pánico, algo infantil. --Mamá, tengo miedo.

No es ese tipo de reacciones lo que ayuda a superar la situación, sino la puesta en común del talento colectivo para encontrar pautas que sirvan para transitar por el cambio, las conductas empresariales adaptativas inteligentes, y el establecimiento de un marco político y financiero responsable donde esas actuaciones encuentren acogida.

La verdad, en todo esto, no es el paréntesis lo importante, lo que preocupa es la incapacidad profesional de nuestras organizaciones corporativas empresariales para afrontar el cambio.

Lohengrin. 18-09-08.

martes, 16 de septiembre de 2008

EL SISTEMA

Son las 00.00 horas del dieciseis de septiembre y el silencio nocturno es un buen aliado de la reflexión. El sistema financiero internacional hace aguas por todas partes y en el telediario de la noche he escuchado palabras muy claras y duras sobre la situación.

Algunos han dicho que los gobiernos democráticos se están convirtiendo en muros de contención de las iras de las gentes. Los expertos consultados están de acuerdo en que lo que sucede se deriva de la falta de regulación de las actividades en los mercados financieros, pero cuando se han hecho la pregunta de quien será capaz de regular eso, no han encontrado respuesta.

La economía financiera se ha separado en los últimos años de la economía real, y lo ha hecho sin ningún control democrático que pudiera frenar los excesos cometidos.

Hasta aquí, mas o menos, todo el mundo estará de acuerdo en el análisis de la situación. La pregunta es, ¿porque ha sucedido tal cosa?

Seguramente no hay una sola respuesta, pero yo ensayaré la mía haciendo referencia a las limitaciones de la concepción clásica del Estado a partir de Montesquieu. Cuando se establece la separación de poderes, se deja fuera el poder del dinero que, como estamos viendo, es el poder mas influyente en la vida de las gentes.

La concepción del Estado como un conglomerado de legisladores, poder ejecutivo y jueces, no incluye una representación física del poder del dinero, que queda fuera, a extramuros del sistema político y parlamentario, lo que explica la incapacidad de los aparatos de gobierno para intervenir de una manera preventiva en el ejercicio de ese poder que, desde las desregulaciones neoliberales de Regan y Tatcher, se inventó la globalización como un modelo nuevo que les permitía hacer su sacrosanta voluntad, y desde entonces han vivido en un mundo aparte, a extramuros de cualquier fórmula de control democrático.

En mi opinión, la respuesta a la pregunta de ¿quien será capaz de regular eso?, pasa por alguna forma de articulación del poder del dinero en los sistemas democráticos, de modo que no sean solo los diputados y los gobiernos quienes rindan cuentas en los parlamentos, sino que alguna forma de representación de quienes constituyen el sistema financiero debe poder ser interpelada periódica y regularmente en los parlamentos nacionales y en los órganos de representación supranacionales, y sus acciones, y sus omisiones, deben poder ser valoradas, censuradas, si es el caso, porque el dinero no puede estar al margen de un mínimo de responsabilidad social por lo que hace, o por lo que no hace.

La importancia de la crisis galopante de los sistemas financieros en la economía mundial, comienza a tener el alcance de una mutación profunda del mundo de los últimos quince años. Es necesario aprovechar esta situación para crear unas nuevas reglas del juego, donde los poderes democráticos institucionales puedan exigir un mínimo de ética social que asegure el funcionamiento productivo de los sistemas políticos, económicos y financieros.

El neoliberalismo económico y financiero está agotado, pero no se trata de regresar a un sistema intervencionista que frene el crecimiento económico, sino de inventar mecanismos, formas de relaciones institucionales nuevas, que incorporen el dinero como parte de los poderes del sistema, porque solo con esa inclusión, se les podrán imponer límites éticos y controles democráticos cuya ausencia, como ha quedado ámpliamente demostrado, está en la raíz de las tremendas convulsiones que agitan cada día la economía de las naciones, supuestamente libres y soberanas, pero inermes, completamente ineficientes, para resolver los problemas causados por los excesos de ese poder, el del dinero, que ha rebasado todos los límites éticos, racionales, de responsabilidad social, sin que ninguno de los supuestos mecanismos de protección contra sus abusos haya funcionado.

En el final de la década de los sesenta, muchos hablábamos de “El Sistema”, como si fuera una abstracción, algo sin rostro, imposible de personalizar. Es hora de reconocer al dinero como una parte visible del sistema, darle rostro, identificarlo, para incorporar su representación como un poder mas a los aparatos institucionales, y así poder exigirle la cuota de responsabilidad social que le corresponde en la vida de las gentes.

Si lo dejamos fuera otra vez, si no aprendemos de los errores, esta no será la última crisis financiera que pondrá en riesgo los equilibrios mundiales. O eso, o los metemos a todos en la cárcel cuando se pasen. Yo les preguntaría antes, que es lo que prefieren.

Lohengrin. 16-09-08.

lunes, 15 de septiembre de 2008

EL HOMBRE Y EL MEDIO

En la vieja casa donde nací había un cuarto oscuro donde mis tíos de América dejaron abandonada una colección de divulgación científica, antes de embarcar precipitadamente hacia el exilio desde un puerto francés, en el último barco, con la urgencia característica de la época.

De niño, miraba fascinado las fotografías de esos volúmenes, firmados por famosos antropólogos, como Margaret Mead. Secuoyas gigantescas, cuyos troncos habían sido parcialmente vaciados, para ceder el paso a una carretera, niños sentados sobre nenúfares enormes que flotaban sobre el agua, fauna oceánica, cachalotes y orcas, animales árticos, todo un mundo de imágenes exóticas que, de no haber sido yo un niño tranquilo y apocado, debieran haberme conducido a la afición por la aventura.

La colección, si no recuerdo mal, se titulaba así, “El hombre y el medio” y constituía, ahora lo percibo así, una obra muy avanzada para la época, precursora del interés que vino después, con el desarrollo de los medios de comunicación, por el conocimiento de la naturaleza y por la Ecología, que no es otra cosa, precisamente, que el estudio de las interrelaciones entre el hombre, el medio en que vive, y los efectos de esa, en ocasiones, contradictoria y dramática relación.

Hace una semana que el medio en el que vivimos en Heliópolis se muestra generoso con nosotros, los calores de bochorno que atormentaban nuestra nocturnidad han remitido, los vientos cálidos y húmedos con los que Africa materializaba su venganza por el trato recibido, ya no soplan hacia la península, y en los últimos días, la atmósfera se muestra limpia, casi traslúcida
y las temperaturas --el medio climático-- nos ofrecen un bienestar ambiental propicio para la vida amable y distendida.

En una de estas noches apacibles, exentas de ese calor excesivo al que atribuimos a veces comportamientos exaltados que concluyen en reyerta, alguien apuñaló mortalmente, aquí en el barrio, a un colega suyo, en una discusión por un móvil. Me lo contaron el viernes, mientras tomaba café en el Maravillas, y luego he visto los titulares en los periódicos de los días siguientes.

Es muy posible que el consumo excesivo de alcohol haya tenido que ver en ese trágico desenlace, pues sucedió en el contexto de una concurrida reunión de fin de semana, en un espacio público frecuentemente utilizado con esa finalidad. Queda por saber porqué el consumo excesivo de alcohol está tan presente entre personas que viven en una situación de precariedad y pocos recursos económicos, como al parecer son las personas que frecuentan ese lugar, que seguramente constituye una de sus escasas oportunidades de diversión. En todo caso, aún no hay suficiente información para conocer con detalle lo sucedido.

Es trágico que, cuando el medio en el que vivimos nos ofrece una tregua temporal, tan propicia para la vida, como es la ausencia de temperaturas extremas, de meteoros amenazantes que en otros lugares causan desolación y ruina, no acomodemos nuestro ánimo a la bonanza del clima, no sepamos integrar en nuestra conducta la transparencia del entorno, la suavidad nocturna de las noches calmas y nos matemos unos a otros, por un móvil.

Aquella colección de mi infancia, El hombre y el medio, tenía mucha información sobre las maravillas de la naturaleza, incorporaba el estudio de la vida y costumbres de algunas etnias aborígenes, que vivían en lugares apartados de la civilización, pero apenas aportaba información sobre la naturaleza y las costumbres del hombre moderno.

Es posible que esa ausencia haya determinado mi incomprensión de la condición del hombre moderno, urbano. Por mas que le doy vueltas a ese suceso ocurrido en el barrio, no consigo entenderlo.

Lohengrin. 15-09-08.

viernes, 12 de septiembre de 2008

LA NOCHE

“Desperté entre escombros de sueños. Busqué entre los escombros algún trozo de realidad y encontré que había soñado con una película de Antonioni, pero eso no es posible, porque siempre me he negado a ver el cine de Antonioni. Removiendo entre las ruinas, encontré la cima del Fuji Yama, en cuya nívea blancura alguien había escrito, “La noche...vasta demolición que se acumula..” .Reconocí la cita de Octavio Paz –Arbol adentro-- y entonces comprendí que el blanco de la nieve era el cabello de mi prima mejicana, que estuvo comiendo en casa el otro día, y la presencia de Paz en el sueño un fragmento de la conversación que tuvimos. --Me gustan sus ensayos, pero no sus poemas-- había dicho Rosa, mi prima.

Recuerdo que me acosté pronto, pero no pude conciliar el sueño por el bochorno. Anduve dando tumbos por la casa, saliendo y entrando del balcón, fumando un cigarrillo tras otro, hasta que el viento cambió y me eché en la cama de nuevo, cuando ya era muy tarde.

No puedo precisar si lo soñé, o realmente estuve en el cine la tarde de ese mismo día. “Aritmética Emocional”, una especie de suma de sentimientos de unos personajes torturados por su pasado común, por su estancia en un campo de concentración cerca de París, en la época en que el gobierno francés obedecía a las autoridades de la ocupación alemana, reteniendo allí a las personas identificadas como judíos, en espera de su traslado a los campos de exterminio. Max Von Sidov, Gabriel Byrne, Susan Sarandon, son los antiguos supervivientes de aquel encierro que se encuentran de nuevo. Cristopher Plummer es el marido de Susan, forzado anfitrión de los fantasmas del pasado que acoge contra su voluntad.

En una noche rara como la que yo he pasado, Plummer se desvela, solo en su habitación, mientras su mujer cohabita en el granero con Gabriel, su amor del campo de prisioneros, va a ver a Von Sidov en su alojamiento y le dice, con desesperación, --No puedo dormir. Este le contesta, --Pues entonces, comamos, si queremos vivir, hay que comer.

La película termina en un amanecer luminoso, en Canadá, después de esa noche lóbrega, con los dos viejos, Von Sidov y Plummer, cogidos de la mano de un niño, mientras el manuscrito en el que la Sarandon anotó todas las atrocidades que vio en el campo, queda borrado por la lluvia.

Rosa me contó que México es un país difícil, con tres mil muertos al año por reyertas entre narcos, secuestros, una corrupción galopante, un grado terrible de contaminación ambiental y una moneda dependiente del dólar de su vecino mas poderoso. Ahora que el dólar está fuerte, y el Euro vacila, ella recibe mas dinero por su pensión mejicana de profesora de literatura jubilada.

No tengo nada claro si la visita de Rosa ha sucedido en realidad, o fue solo soñada. Tal vez, la cima del Fuji Yama la vi en algún documental de la 2, mientras estaba imsomne. A lo mejor, si que vi la película de Antonioni, me suena que la han dado esta temporada en la filmoteca. Tal vez lo de la “Aritmética Emocional”, solo proviene de una sinopsis leída apresuradamente en la prensa.

Vuelvo a buscar entre los escombros, para intentar separar lo real de lo soñado, pero es inútil. De todo este embrollo, lo único que me queda claro es el consejo de Von Sidov a Plummer,
--Si queremos vivir, hay que comer.”

Es una suerte que cada amanecer borre los escombros de los sueños que dificultan nuestro tránsito por la realidad. Al parecer, el olvido es tan importante como la memoria, y la trama tejida con esos dos hilos, convenientemente combinados durante el sueño, prepara el suelo de la rutina sobre el que caminamos cada día.

En fin. LA NOTTE. La noche.

Lohengrin. 12-09-08.

MARCHANTES

Ese artista inglés que muestra un becerro conservado en formol dentro de una vitrina, con un tocado aurífero como si fuera el buey Apìs, ha dado la campanada en el mundo de los marchantes y galeristas, al entregar su última producción artística directamente a Sothebys, pasando de su galerista, que le trincaba la mitad de su facturación por su labor de intermediación. Parece algo revolucionario, pero si lo analizas objetivamente, no lo es tanto.

El artista en cuestión ha cambiado su dependencia del marchante, por la del subastador. Para ser un acto decididamente rompedor, tendría que haber prescindido también de Sothebys, poner su obra en el jardin de su casa y subastarla directamente, como dicen que hacen los norteamericanos con sus trastos domésticos cuando se cambian de casa.

Por otro lado, esa acción de prescindir de los intermediarios no es enteramente original. Hace al menos dos años que los blogueros prescindimos de la figura del editor para publicar nuestras paridas pero, como el artista inglés, que se ha librado del marchante sin prescindir de los subastadores, nosotros ya no llamamos a la puerta de los editores, pero estamos en manos de los gigantes del ciberespacio, Google y demás.

Miras tu sitio en Google, con la palabra mágica Ciberlohengrin, y encuentras dieciseis páginas con mas de ciento setenta referencias al contenido del blog. Vuelves a mirar al día siguiente, y la cosa se ha reducido a doce páginas, con algo mas de ciento veinte referencias, sin que sepas muy bien porqué.

Esta dependencia de artistas, escritores y artesanos, de los intermediarios de cualquier naturaleza, sean marchantes, galeristas, subastadores o compañías cibernautas, creo yo que tiene su origen en el hecho de que la habilidad creativa y la habilidad de vendedor no siempre coinciden en la misma persona. Parece como si la biología hubiera escogido lugares diferentes del cerebro para situar esas habilidades que, con frecuencia, no están interconectados.

Vender, además de una habilidad específica situada en algún lugar de las estructuras neurológicas es, también, una técnica. Es necesario despertar la atención, provocar el interés, estimular el deseo del comprador, para después culminar con la acción el proceso de la venta. Muchos vendedores se quedan en el primer estadio, sin la enérgica persuasión necesaria para rematar la venta Por eso, los buenos comerciales, los que tienen una facilidad innata para completar el proceso, para rematar con la acción ese método de seducción, ganan sueldos fabulosos y los directivos aspiran a ficharlos para sus empresas.

Conozco algún comercial que tiene como principio vender solo productos de reconocida calidad, pero los que mas se cotizan son los que son capaces de vender cualquier cosa, con independencia de la naturaleza del producto o servicio de que se trate, de su buena o nula calidad. Esta tipología de comerciales se caracteriza, no solo por su habilidad en el dominio de la venta, sino por una absoluta falta de escrúpulos, que serían un obstáculo para la conducta agresiva de la que necesitan para alcanzar sus objetivos.

Cada vez mas, las editoriales involucran a sus escritores en el proceso de promoción y venta de sus libros, lo que les obliga a estar largas temporadas sin escribir, al servicio de apariciones públicas en televisión, entrevistas a los medios escritos, o comparecencias en los programas de radio, puesto que, sin ese esfuerzo de comunicación, el producto no se vende.

Una ventaja del blog como soporte de la escritura es que, por ahora, nadie te obliga a realizar ese esfuerzo, aunque, si te vas tres días al campo, cuando regresas, alguien, sin que sepas muy bien porqué, ha reducido tu presencia en el directorio de Google en tres páginas y se ha cargado cincuenta referencias de tus entradas. No pasa nada. Sigues escribiendo como antes, porque, como en tus neuronas no está instalada la habilidad de vendedor, el trabajo creativo es lo que realmente te interesa. No obstante, conviene aclarar que el inglés ese de la vaca, el que ha prescindido de su marchante, se estima que facturará 75 millones de euros como producto de la subasta de Sothebys, de cuya cifra los subastadores se quedaran la comisión habitual.

En el blog no puedes aspirar a semejantes honorarios, aunque se de algunos blogueros que reciben algunas cantidades simbólicas por la publicidad que insertan en sus soportes.

De momento, este blog no tiene ingresos por publicidad pero, quien sabe, a lo mejor con el paso del tiempo encuentro algún marchante interesado en su promoción. Cuando suceda, si es que sucede alguna vez, ustedes serán los primeros en enterarse.

Lohengrin. 12-09-08.

jueves, 11 de septiembre de 2008

LA POLÍTICA INVERSA

En tiempo de crisis, algunos pensamos que las personas mas desfavorecidas, por su vulnerabilidad, necesitan mas del paraguas de la protección social, que es uno de los pilares que justifica la existencia del Estado. El Gobierno de Heliópolis, como demuestran los hechos de su política cotidiana, actúa como si pensara la contrario. El modo tan singular en que está aplicando la Ley de Dependencia en esta comunidad, lo caracteriza como uno de los gobiernos mas insolidarios de todo el país.

Estando su presidente Camps, y el Conseller de Bienestar, Cotino, tan vinculados a la Iglesia y al Opus, instituciones en teoría tan compasivas, uno piensa lo que podría suceder si ambos políticos carecieran de los valores cristianos que se les suponen y se le pone la piel erizada.

No se trata ya de la foto que hoy publica “Levante” en primera, en la que aparecen dos personas dependientes, una de ellas con las dos piernas amputadas, a las que se les ha negado la ayuda prevista en la Ley, ni de lo que se relata en las páginas interiores sobre los miles de cartas que se han enviado a los solicitantes denegando esa prestación social. Se de fuente directa que a otras personas, que han estado recibiendo una ayuda social equivalente durante diez años, ahora se les ha retirado, sin que sus circunstancias personales y de salud hayan cambiado.

Si se les retira ahora la ayuda, será porque se considera que no la merecen. Si es así, alguien tendrá que explicar porque, durante diez años, se han estado dedicando recursos a unos fines que no eran prioritarios. Si no es el caso, tendrán que explicar su cambio de criterio. Si se trata de que la aplicación de la Ley exige que se soliciten de nuevo las ayudas antiguas, que lo digan, y que las prorroguen para no dejar en la indefensión a los antiguos beneficiarios. Pero estos señores, los políticos que nos malgobiernan, no explican nada. Los miles de cartas envíadas denegando la ayuda a los nuevos solicitantes, según el periódico citado, notifican la negativa, pero sin argumentarla.

Es lo que tiene la derecha local, prefiere la autoridad a los argumentos. Cada vez que se les ha pedido que den cuentas de las muchas sociedades mixtas o participadas que han creado para eludir la transparencia exigible a las cuentas públicas, se han servido mas de la autoridad que de los argumentos, para dar largas y mantener el oscurantismo. Cada vez que ha sucedido uno de los grandes eventos a los que son tan proclives, nos hemos quedado sin conocer los números que han acompañado esas iniciativas públicas.

Así, con ese oscurantismo, esa falta de transparencia, ese gobierno, que debiera ser un modelo de probidad informativa, se queda a merced de los rumores. Como el insistente rumor que divulga que la Generalitat no tiene ni un duro. Que se han gastado todo lo que tenían, y lo que no tenían, en una serie de actuaciones ajenas a los presupuestos. Y que esa, precisamente, es la razón de que, ahora, no puedan atender las solicitudes previstas en la Ley de Dependencia. --Señores, no hay un duro, vuelvan después de la crisis.

La política inversa es un método para empobrecer mas a los pobres y favorecer a los ricos, y no es exclusiva del gobierno de Heliópolis. En los campamentos mineros, las compañías concesionarias disponían de tiendas de alimentación y suministros, y los precios que practicaban les permitían recuperar casi todo el salario que pagaban a los trabajadores.

Trabajé en un compañía exportadora, en los ochenta, y el apoderado, una persona de la confianza del empresario, era el primero en acceder a los sobres de la nómina, y extraía de ellos una especie de impuesto revolucionario, algo relacionado con los aumentos del convenio y las condiciones particulares de cada uno, que era su modo de contribuir a enriquecer al patrón, empobreciendo a los trabajadores. Fue la primera vez que fui consciente de la existencia de un Robin Hood, al revés, o sea, la política inversa.


Ahora, el gobierno de Heliópolis toma la bandera de aquel Robin Hood inverso y, en tiempos de crisis, se muestra decidido a restar recursos con destino a los mas débiles, como una contribución original a las necesidades sociales mas perentorias. Con ello, mas que un gobierno, parece una entidad financiera. Ya se sabe que, los bancos, te dejan el paraguas cuando hace sol, y te lo retiran cuando llueve.


Ese es el gobierno que la mayoría de mis conciudadanos quieren, pues lo están votando durante mas de un decenio. Esperaré hasta las próximas elecciones, si todo sigue igual, tendré que pensar en marcharme a otra parte. Y ustedes, ¿que piensan hacer?


Lohengrin. 11-09-08.

martes, 9 de septiembre de 2008

SEPTIEMBRE II

He bajado al Maravillas y al preguntarle a Tony por las estadísticas de la barra, me ha contestado que las cifras de lo que ha transcurrido de Septiembre, no solo han caído en picado, sino que el componente de servicios a crédito ha crecido de un modo escandaloso. Descontada la exageración que siempre está presente en su valoración de la marcha del negocio, “está la cosa mu mal” es la muletilla que siempre emplea, parece que ese indicador es el reflejo de una tendencia mas general en el sector de las economías de servicios.

Así como la basura, las toneladas recogidas de menos, son un indicador fiable del descenso en la actividad económica, las estadísticas del bar Maravillas parecen indicar un empeoramiento relativo en el estado de las economías domésticas del barrio que repercute en los negocios de servicios establecidos en su entorno. No se puede extrapolar, así, sin mas, lo que sucede en el barrio que, por su carácter periférico, tal vez ofrece unos índices de pobreza mayores que otras zonas urbanas, por eso hay que acudir a cifras mas generales para encuadrar los datos locales en una realidad mas amplia.

Los medios de comunicación han divulgado que en España hay nueve millones de pobres. Nueve millones de pobres no se improvisan de un día para otro. Hace falta una persistencia meticulosa en los sistemas de exclusión social para fabricar una cifra así. Marcelino Camacho, ¿recuerdan? estuvo años repitiendo, en su tiempo político, que había ocho millones de pobres. No hace tanto, compartí una jornada de comunicación interactiva, en la que actué de animador del cotarro, pregunté a los asistentes, muy cercanos a organizaciones y proyectos de atención y reducción de la pobreza, y la cuantificaron en ocho millones y medio.

Es decir, que de los nueve millones, tal vez se pueden atribuir quinientos mil nuevos pobres añadidos en los últimos años, a los que ya existían de antiguo. Los indigentes están incluídos en esa cifra, pero no todos los pobres están en estado de indigencia. Los indigentes no tienen nada, los pobres no tienen suficiente, que es distinto.

En aquel coloquio al que asistí como moderador, en un barrio periférico de extrema pobreza, aporté un documento de 1.646 en el que el poder real pedía a las autoridades locales que realizaran un censo de la población y precisaba de manera expresa, que no se incluyera a los pobres. Al menos, ahora, los contamos. Parece un progreso. Es un progreso. Ya se sabe que, la primera condición para resolver un problema, es el reconocimiento de su existencia. Pero parece bastante complicado que un sistema basado en las desigualdades, consiga reducirlas. Las cifras indican que se avanza en los diagnósticos, pero no en las soluciones. Dicho de otro modo, la velocidad del rodillo de las desigualdades avanza mas deprisa que los efectos de las políticas para reducirlas.

En España, el porcentaje de indigentes y pobres sobre el total de la población está próximo a los niveles de abstención que se registran en las consultas electorales. Que los especialistas en sociología electoral saquen las conclusiones, yo, solo señalo el hecho, aunque me parece significativo.

Con estas pinceladas, solo trato de ilustrar las tendencias que pone de manifiesto el transcurrir de la primera decena de septiembre en nuestro país, pero esa visión queda coja si no miramos un poco mas allá. En Estados Unidos, la Reserva Federal acaba de inyectar unos doscientos mil millones de dólares en las dos entidades mas importantes dedicadas al crédito hipotecario, para impedir su quiebra.

Lo de la economía financiera norteamericana es de juzgado de guardia. Parece el juego de la pirámide. Primero conceden masivamente créditos hipotecarios sin considerar suficientemente la solvencia de los deudores. Luego endosan esas hipotecas en forma de títulos negociables en el sistema financiero mundial, con el consiguiente quebranto para la banca europea, sobre todo la inglesa y la suiza. Ahora salvan el culo de lo que parece a todas luces una estafa monumental con dinero público. A continuación, claro está, emitirán bonos del estado que colocaran en economías ajenas para obtener los recursos que les permitan tapar el agujero. Si eso no es una estafa piramidal, ya me dirán que es.

Del mismo modo que en nuestras propias economías hay desigualdades que generan pobreza, en las relaciones de poder internacionales operan otras desigualdades, a nivel de Estados. Unos van de listos, con el apoyo de su poder e influencia a nivel mundial, y a otros nos toca el papel de tontos, pero así como a los pobres, por lo menos los contamos, no se de ninguna relación de países tontos sometidos al dominio de los listos, aunque sospecho que pocos países europeos estarían fuera de esa lista, en el supuesto de que se formalizara.

Para que no sean todo desigualdades y pobreza, el gobierno de Heliópolis ha tenido la lucidez
de promover la contratación de la cantante Madonna, que actuará este mes por aquí. Madonna, ese animal energético, invulnerable a la debilidad y al paso del tiempo, que seguramente se machaca cuatro horas diarias en el gimnasio, paradigma de la voluntad triunfante, cualesquiera que sean las circunstancias o la coyuntura, nos inspirará la conducta que debemos seguir ante las dificultades.

Con ese estímulo, y adquiriendo la costumbre china de practicar el tai chi en los parques públicos antes de comenzar cada jornada, tal vez nos convirtamos en una nación pujante, resistente a las dificultades, optimista y positiva, tal como predican nuestros políticos mas creativos.

Lohengrin. 9-09-08.

lunes, 8 de septiembre de 2008

EL ZOCO

Me gustan las medinas árabes, las plazas de los mercados, árabes o no, todos esos lugares donde la vida se manifiesta a voz en grito, cada vendedor ofreciendo sus productos, clientes y vendedores regateando como si fueran actores, cada uno representando su papel, mientras los mas ancianos, recogidos en el patio interior donde se negocian las especias, comercian con una sabia discreción que contrasta con la algarabía del zoco.

Los políticos modernos, en su afán de acercarse a los ciudadanos, de los que viven bastante alejados, se asoman en ocasiones al zoco de los medios de comunicación y vocean su mercancía, como si estuvieran en un puesto de pescado, para que todos se enteren. Cuando lo que dicen responde a alguna toma de decisiones meditada, tratada en los foros que les son propios, esa información alcanza la condición de noticia y a veces interesa a los destinatarios.

Cuando se trata de un voceo improvisado, resultado de una ocurrencia de vendedor que desea, solo, llamar la atención del público, sin preocuparse del rigor de lo que dice, algo así: -Sardinas, tengo sardinas de Alaska, son las mas frescas..., sucede lo que le ha sucedido al ministro de trabajo que, no habiendo sido objeto de consenso previo su discurso sobre la inmigración laboral, su jefa de filas se ve obligada a desmentirle con rotundidad.

Aún resuena el eco de esa sonora metida de pata, y el presidente del gobierno se pone a hablar de pensiones. ¿Pensiones?. Faltan cinco meses, creo, para que se materialice el cobro de las pensiones que, como es lógico, deberán ser revisadas de acuerdo con las reiteradas promesas del gobierno socialista, y mientras el público de la representación teatral que es, en alguna medida, la política española, espera que le hablen de cosas mas acuciantes, el gobierno, por boca de su presidente, le habla de cosas tan obvias, además de demoradas en el tiempo, que algunos tenemos la sensación de que la política española se manifiesta, efectivamente, en un zoco, ese lugar donde la vida se expresa a voz en grito, sin que importe el rigor de lo que se dice, ni su oportunidad, sino solo conseguir atraer el mayor número de compradores al puesto desde el que cada uno ofrece a voces su mercancía.

Es posible que, como en la medina de Fez, todo ese batiburrillo de mensajes contradictorios, declaraciones extemporáneas, improvisaciones de pescadero, sean el telón de fondo de la actividad de otros actores mas sensatos quienes, discretamente apartados en un patio interior, lejos del bullicio de la medina, hagan sus cuentas sosegadas, preparen sus transacciones y doten al mercado político de la sensatez que uno percibe que falta en quienes están a la vista, en los puestos de la plaza, expuestos a la curiosidad pública.

Mejor que sea así, porque, en caso contrario, si el bienestar de los ciudadanos solo estuviera en manos de quienes vocean en la plaza del mercado, pendientes de atraer a los compradores, sin tener un conocimiento claro de la mercancía que demandan en cada momento, de cuales son sus necesidades, y que medidas deben poner en marcha para atenderlas, quienes hemos contribuido con nuestro voto a reclutarlos, deberíamos ir pensando en una solución alternativa.

Desde mi punto de vista, esa alternativa no puede ser otra que profundizar en un sistema democrático mas participativo. En la era de Internet, de la comunicación cibernauta, es fácil recabar de los votantes la opinión que les merece la gestión de un ministro, o de un departamento determinado, o de una política específica. Si esa gestión es rechazada por la mayoría de los consultados, los mismos que han votado la opción política que gobierna, pues se le cesa y ya está, no sin antes proponer una terna para su sustitución, si es el caso, por el mismo procedimiento de mayorías populares.

Es obvio que ese procedimiento es técnicamente posible y económicamente viable. Porque no se lleva a cabo?. ¿Será porque la política española es, en buena medida, una representación teatral?

Pueden dejar aquí su opinión, en forma de comentario.

Lohengrin. 8-09-08.

viernes, 5 de septiembre de 2008

CIUDADANÍA

“To be......or not to be”

Introducir la duda entre los estudiantes, en lugar de impartir certezas, puede ser un buen modo de comenzar el curso. La duda induce la necesidad de hacerse preguntas y, aunque la mayoría no tengan respuesta, esa actividad intelectual empuja el flujo sanguíneo hacia la red neuronal y favorece el pensamiento crítico.

Una vez comenzada la clase de Educación para la ciudadanía en inglés, cumpliendo así la norma que la Consellería trata de imponer, con graves complicaciones y conflictos aún no resueltos, el profesor continuaría su exposición en lengua vernácula, muy necesitada de divulgación en los núcleos urbanos, para concluirla en el idioma del viejo imperio castellano.

Ofrezco esta solución, ecléctica y trilingüe, al Conseller Font de Mora, para ayudarle, generosamente, a salir del charco en el que se ha metido, el solito.

Después de todo, lo que se pretende al introducir esta nueva materia en el currículo escolar es formar futuros ciudadanos, por lo que la importancia del objetivo excede del vehículo formal, la lengua, que se use para hacerlo. He buscado en mi vieja enciclopedia la noción de ciudadano, pero al tratarse de una edición pre democrática, apenas alude a su acepción como sujeto de derechos.

En Wikypedia se puede encontrar una definición mas extensa, que alude a la condición de miembro de una comunidad política, con la consiguiente relación de derechos y deberes, en relación con esa comunidad y los individuos que la forman. Un elemento esencial de esa relación es la participación del individuo en los asuntos comunes. Aquí es donde parece que ha fallado el inefable Font de Mora, al no conseguir el consenso por medio de la participación, y tratar de imponer su punto de vista sobre como se debe impartir la asignatura de Educación para la ciudadanía.

Ese punto de vista está influido por el origen de la norma, un gobierno central de un color político distinto al de su partido, lo que está generando un montón de problemas, por la resistencia del gobierno autonómico a aplicar las normas del ministerio, que le ha llevado a usar toda clase de subterfugios para eludirlas.

Tengo serias dudas de que en los institutos de secundaria tengan capacidades para formar ciudadanos, después de tantas décadas de enseñar solo textos, pero nada se pierde con intentarlo.
Que se comience la clase, o no, con una pregunta en inglés, no es imprescindible. Que les quede claro a los estudiantes que son sujetos de derechos y deberes, me parece esencial. Que se les enseñe a dudar alguna vez, además de algunas certezas, puede ser muy útil. Que aprendan a cultivar el pensamiento crítico, eso ya es harina de otro costal. Para unos puede ser valioso, para otros demasiado peligroso.

Se imaginan si hace unas décadas nos hubieran enseñado a cultivar el pensamiento crítico? En ese supuesto, es probable que la ciudadanía, los ciudadanos, hubieran echado a patadas a quienes malgobiernan Heliópolis con el aval del voto acrítico. Antes, seguramente, se habrían hecho algunas preguntas, comenzando por el To be...or not to be , al final habrían llegado a un montón de preguntas de contenido político, de muy incómoda contestación.

Ese es, en el fondo, el conflicto que subyace en la aplicación de la norma para impartir Educación para la ciudadanía. Es una opinión.

Lohengrin. 5-09-08.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

EL PASEO

He bajado al Maravillas pero, en lugar de dedicarme a la lectura apresurada del periódico prestado, al regreso he comprado un ejemplar, porque me apetecía dar un tranquilo paseo entre su floresta. Comienzo el paseo por la tercera, porque los desniveles de los enormes titulares de la primera y los abismos de la foto que ocupa media página, impiden el caminar detenido y placentero entre sus líneas.

Es un placer pánico deslizarse por sus artículos. La suave brisa matinal que se cuela entre los blancos que separan cada línea es de una frescura estimulante. Algunos están escritos con un estilo tan delicado que el tránsito de un párrafo a otro apenas se nota, ni siquiera tienes que alargar el paso, de hecho, no notas para nada que estás caminando por una oración distinta de la que le precede, y las líneas de escritura evocan los setos perfectamente recortados de un jardín, tienen su mismo aroma a hierba fresca a esta hora de la mañana.

Algunos jardineros, como Fernando Delgado, cuya columna echo en falta esta mañana, han hecho uso últimamente de prácticas de cultivo mas abruptas, como recurrir en cada artículo al post scriptum, una práctica, en mi opinión, algo bárbara, que no mejora su anterior estilo de jardinero oriental que cultiva la ironía como pocos.

En su lugar, aparece hoy la columna de Millás, ese jardinero exótico. Paseas por las lineas de su espacio en el jardín del periódico, moderadamente salpicado por las negritas y algo mas frecuentado por las cursivas, y percibes la originalidad personal de los ejemplares que lo habitan. Mientras caminas por las veredas de los interlineados, un aroma exótico a fronda caribeña se extiende por la columna, dando testimonio de que te encuentras en un lugar único por su singularidad.

Algunos de esos rincones por los que hoy estoy dando un pausado paseo, no son meros entornos vegetales, sino que están habitados por la fiera crítica y, al caminar entre sus líneas, de vez en cuando te sobresalta un rugido, pero todo se queda en un susto, que no te impide culminar el tranquilo vagabundeo por esos caminos, a veces amenazantes.

Entre la fauna que aparece por sorpresa en mi deambular, también hay animales domésticos agradecidos, entre los cuales reconozco a un viejo conocido que inspiró la primera página de este blog. Con una circularidad sorprendente, vuelve a ocuparse del mismo tema que estimuló mi rugido crítico de entonces, pero esta vez lo hace con un ligero toque crítico, ausente en su artículo de hace ya una veintena de meses sobre la Fórmula 1, por lo que no objetaré nada a sus palabras.

En mi recorrido por el periódico de hoy, no son los contenidos lo que me interesa, sino el placer físico de caminar entre sus frondas, disfrutar la suavidad de sus trazados, la moderación de sus pendientes, la elegancia de sus jardineros, su exotismo creativo, la circularidad perfecta de algunos estilos, la brisa fresca que se cuela procedente de los blancos entre las líneas y la perfección con que están recortados los setos de cada línea, cada párrafo, aunque, en ocasiones, te lleven a un laberinto habitado por animales domésticos agradecidos, en el que no hay suficiente claridad.

En fin. El paseo.

Lohengrin. 3-09-08.

lunes, 1 de septiembre de 2008

EL SÍNDROME

He bajado al Maravillas, porque hoy se escenificaba su solemne apertura, después del cierre vacacional, y la gente no hablaba de otra cosa. El síndrome por aquí, el síndrome por allá. No creo en la existencia de esa chorrada tan repetida, el síndrome postvacacional, pero haré como si me lo creyera, porque hoy no se me ocurre escribir de otra cosa.


Al parecer, esa cosa son las manifestaciones visibles de una conducta adaptativa que se suele producir, dicen, cuando la gente toma vacaciones y se ve obligada a regresar a la rutina habitual, o sea, que yo, que ni me he ido ni he vuelto, estoy a salvo de sus consecuencias, que quienes distraen al personal desde los medios de comunicación afirman que afectan a dos de de cada tres personas.


Al ser cosa de psicólogos, que es una profesión algo dudosa, constituída en su mayoría por individuos con notas académicas tan bajas que no han podido acceder a otros estudios mas serios, ese componente de aluvión, con independencia de los brillantes profesionales que hay en todos los campos, les obliga a hacer mucho ruido con los conceptos que dan al conocimiento público, de ahí mi escepticismo.


Suponiendo que tal síndrome exista, uno puede imaginar que no afecta a todos los regresados por igual, sino que toma diversas formas, según el caracter, la predisposición y las circunstancias de cada uno. Los tipos con nervios de acero, que no se conmueven por nada, seguro que están exentos de esas tonterías.


El resto, si han seguido las recomendaciones de entretenerse unos días en la cámara de descompresión, es decir, adelantar su regreso, para reducir la brusquedad del cambio, están jodidos, se han dejado robar unos días de vacaciones, por nada, aunque, a juzgar por la escasa densidad de tráfico el último día de agosto, al menos habrán contribuído al menor número de siniestros y eso, en si mismo, ya es algo positivo.


Pero, vamos a ver, en un mundo tan rotundamente cambiante como el nuestro, donde de un día para otro te quedas sin trabajo, cambias de residencia, o te deja tu chica, ¿alguien puede creerse esa auténtica chorrada que ahora está de moda teorizar alrededor de la vuelta de las vacaciones? En una sociedad en la que la gente cambia de escenarios contínuamente, viaja con regularidad y los ciclos semanales están partidos drásticamente en trozos tan opuestos de trabajo y ocio,¿ Es creíble que la mayoría de sus individuos no hayan desarrollado unas pautas de conducta adaptativa al cambio resistentes a la prueba del regreso vacacional? Bueno, pues si hacemos caso a los comentarios tópicos –no he visto nunca las estadísticas que tanto se invocan-- parece ser que si.


He mirado en el Maravillas y en la conducta de los parroquianos, los mismos de siempre, con sus mismas actitudes y los mismos chistes malos, no he encontrado ni rastro del síndrome, aunque debo reconocer en mi actitud, al salir del bar, un fenómeno cíclico que se repite todos los veranos.


Al cruzar la calle, cuando regresaba de tomar café, he visto a la misma mujer, con un vestido Amarillo pálido --ver página del mismo título-- que mi imaginación vislumbra todos los veranos, aunque no siempre en la misma fecha. La luz solar producía un efecto de transparencia en la ligera textura de su vestido, pegado a sus pechos y a su pubis por una fresca brisa de levante, y dejaba entrever la rotunda anatomía de sus muslos entre el ligero vuelo de la ropa, que parecía la vela de una vieja embarcación latina empujada por el viento.


Vale. Si ustedes dicen que el síndrome postvacacional existe, yo me lo creo, tanto si es cierto como si no lo es. En todo caso, me ha servido como pretexto para la entrada de hoy y, para mi, es suficiente.


Lohengrin. 1-09-08.

Comentarios